El verano ha puesto a prueba el filtro de aire del motor, y es importante sustituirlo para afrontar el otoño y el invierno con un motor que funcione a pleno rendimiento.
El otoño es una época para hacer balance, después de un verano de viajes en coche en el que se descubren nuevos destinos, se recorren carreteras distintas de las habituales, a veces en mal estado o sin asfaltar. Si a esto añadimos la sequedad del clima cuando hace calor y la mayor propagación de insectos y polen, el riesgo de encontrar el filtro de aire del motor sucio u obstruido es, por tanto, real. Sustituirlo por componentes de calidad como los FILTROS SOFIMA significa poner su coche en condiciones óptimas para afrontar el otoño y el invierno.
Un papel esencial
Para darse cuenta de lo importante que es tener un filtro de aire del motor en perfecto estado de funcionamiento, basta con recordar que su función principal es proteger el sistema de admisión del motor de la suciedad, el polvo y los residuos presentes en el aire.
Al ser aspiradas por el sistema de combustible, estas impurezas se acumulan en las superficies interiores de órganos como válvulas, pistones y cámaras de combustión. Un filtro de aire del motor sucio u obstruido puede causar inconvenientes considerables, como el desgaste prematuro de los pistones y los segmentos, la obstrucción de los asientos de las válvulas y los inyectores, el aumento del ruido, la inestabilidad del régimen de ralentí, la parada repentina del motor y el deterioro de la calidad de los gases de escape debido a una combustión imperfecta.
Esto último provoca un aumento del consumo porque el conductor, ante una disminución de la potencia, se ve inducido a pisar más fuerte el acelerador, lo que incrementa la demanda de combustible. Un filtro eficaz, en cambio, garantiza un flujo de aire limpio y una combustión óptima, lo que es esencial para asegurar un rendimiento de calidad y un bajo consumo de combustible.
El momento de la sustitución
La llegada del otoño es un momento óptimo para sustituir el filtro de aire del motor. En cuanto a los intervalos de uso del vehículo, lo mejor es basarse en las instrucciones del fabricante, aunque también hay que tener en cuenta el tipo de carreteras por las que se circula (sobre todo si son polvorientas o no están asfaltadas) y las condiciones ambientales (clima muy seco). Como norma general, la sustitución debe realizarse en cualquier caso cada 10-20 mil kilómetros o al menos una vez al año. No obstante, los usos particulares pueden aconsejar intervalos de sustitución más cortos.
Hay filtro y filtro
No todos los filtros de aire del motor son iguales: en principio, pueden distinguirse tres tipos diferentes, muy extendidos en el mercado.
- Los filtros de papel consisten en papel filtrante plisado, capaz de retener partículas de distintos tamaños; sin embargo, son sensibles a la humedad y tienden a obstruirse más rápidamente, por lo que requieren una sustitución más frecuente.
- Los filtros de algodón utilizan algodón como material filtrante, tratado con aceites específicos que mejoran su eficacia. Pueden reutilizarse varias veces, siempre que se limpien con frecuencia, lo que, sin embargo, acaba alterando su rendimiento a largo plazo.
- Los filtros de alto rendimiento están fabricados con fibras de celulosa y son de naturaleza sintética para lograr el mejor rendimiento posible en términos de durabilidad, eficacia y potencia del motor: los filtros SOFIMA pertenecen a esta categoría.
Calidad ante todo
A la hora de sustituir un filtro, lo más importante es elegir productos de la máxima calidad para evitar cualquier tipo de problema en el motor. SOFIMA revolucionó el sistema de filtración de aire en la década de 1970 con la introducción en el mercado del filtro de aire de panel.
Hoy en día, SOFIMA produce piezas de primera calidad con la misma calidad que los suministros de equipo original, con un catálogo de posventa que ofrece una cobertura casi completa del parque automovilístico europeo. Para encontrar el filtro de aire de motor adecuado para cada vehículo, basta con consultar el catálogo en línea de SOFIMA para el mercado EMEA, constantemente actualizado, en https://sofima-aftermarket.com/EU/.
Tecnología y alto rendimiento también en la posventa
Los filtros SOFIMA de alta calidad son de dos tipos. Pueden fabricarse con medios filtrantes a base de celulosa mezclada con otras fibras sintéticas; los tratamientos hidrófobos aumentan su resistencia a la humedad y prolongan su vida útil. Alternativamente, se fabrican con medios filtrantes 100% sintéticos, complementados con aditivos que garantizan la impermeabilidad al agua, lo que beneficia su durabilidad.
El ejemplo más significativo de este segundo tipo de producto es Multitube, la revolucionaria tecnología de filtración del aire del motor que SOFIMA ha puesto recientemente a disposición en su catálogo de posventa para el Fiat 500 Hybrid, con el código SOFIMA S 1 TUB A.
El Multitube ocupa hasta un 50% menos de espacio que un filtro convencional; la linealidad del paso de aire y la minimización de las pérdidas de presión permiten aumentar la potencia del motor hasta un 4%.
Al mismo tiempo, Multitube es capaz de garantizar una reducción del consumo y de las emisiones. El material filtrante utilizado, constituido por un tejido no tejido compuesto por fibras sintéticas hidrófobas estructuradas según un gradiente específico de diámetro y distribución de la porosidad, mantiene una funcionalidad constante durante todo el ciclo de vida del producto; su eficacia de filtración es superior al 99,5%. Por último, Multitube garantiza una separación completa del agua en el circuito de admisión del motor y ofrece una elevada resistencia a las llamas.
Al confiar en SOFIMA para la sustitución periódica del filtro de aire del motor, puede estar seguro de que puede contar con la última tecnología y una calidad igual a la de la producción de equipos originales.